miércoles, 8 de junio de 2011

EFECTO INVERNADERO

Consecuencias del Calentamiento Global
El clima en la Tierra es muy difícil de predecir, porque existen muchos factores para tomar en cuenta: lluvia, luz solar, vientos, temperatura... Por eso, no se puede definir exactamente qué efectos acarreará el Calentamiento Global. Pero, al parecer, los cambios climáticos podrían ser muy severos.
Una primera consecuencia, muy posible, es el aumento de las sequías: en algunos lugares disminuirá la cantidad de lluvias. En otros, la lluvia aumentará, provocando inundaciones.
Una atmósfera más calurosa podría provocar que el hielo cerca de los polos se derritiera. La cantidad de agua resultante elevaría el nivel del mar. Un aumento de sólo 60 centímetros podría inundar las tierras fértiles de Bangladesh, en India, de las cuales dependen cientos de miles de personas para obtener alimentos. Las tormentas tropicales podrían suceder con mayor frecuencia.


Los primeros pasos para detener el fenómeno:
En la década de los 70, muchas personas comenzaron a darse cuenta de los cambios que estaba sufriendo la Tierra. Al estudiarlos, pudieron observar cuán frágil es el medio ambiente, y lo mucho que los seres humanos dependemos de él. Poco a poco, todos nos dimos cuenta de que no era posible seguir contaminando el agua, la tierra y el aire: la contaminación no iba a desaparecer por sí sola.


Además, muchas actividades humanas estaban afectando al clima de una manera muy, muy peligrosa.
En 1992, las Naciones Unidas realizaron la Primera Convención sobre el Cambio Climático. Desde 1980, científicos y representantes de diversos países se habían estado reuniendo para determinar cómo se producía este cambio y qué se podía hacer para frenarlo. Los resultados se dieron a conocer en la Cumbre de la Tierra, realizada en Río de Janeiro, Brasil, en 1992. El acuerdo fue firmado por 154 países.
¿Qué plantea el Acuerdo de Río? La necesidad de frenar el cambio climático, reduciendo las emisiones de gases de invernadero. Esto significa disminuir la cantidad de combustibles fósiles utilizados (petróleo, gas natural, carbón), y proteger los bosques (ellos atrapan y consumen el dióxido de carbono). También significa disminuir nuestro consumo de energía, y buscar otras fuente energéticas que no produzcan gases de invernadero (energía solar, energía del viento, del agua o de las olas del mar).
La Convención promueve el estudio y la investigación científica, para descubrir nuevas formas de acabar con el efecto invernadero. También se plantea la necesidad de intercambiar tecnología e ideas entre los países, promoviendo ayuda mutua. Además, se reconoce que existen áreas en el mundo que son muy especiales y delicadas (islas, montañas, ríos) y que deben ser especialmente protegidas de los cambios en el clima.

LA CELULA ANIMAL

LA CÉLULA HUMANA

La Célula

Concepto y tipos de células

La biología es una rama de la ciencia que nos ayuda a comprender en gran medida en qué mundo habitamos y quienes son los seres con los que interactuamos, pero seguramente, cuando estudiamos esta asignatura en la escuela por primera vez, en lo primero que habremos hecho énfasis era en la célula. Es que a partir de ella se componente los seres humanos como el resto de los seres vivos; comprender sus características y su composición ha ayudado a miles de médicos a conseguir avances muy significativos en el campo de la medicina.
¿Qué es la célula?

Antes de poder referirnos a ciertas características específicas de este término, tenemos que recurrir a la definición de célula para comprender de manera más detallada a qué nos referimos. Entendemos por ella a una unidad mínima de un organismo capaz de actuar de forma autónoma; absolutamente la totalidad de ellos están formados por células y este es uno de los parámetros que se emplea para catalogar a un organismo, es decir, no se define como tal si no consta al menos de una célula.

Algunos organismos son células únicas, como los microscópicos, protozoos y las bacterias; los animales y plantas se encuentran en la clasificación de “organismos pluricelulares” debido a que cuentan con muchos millones de células las cuales se organizan en órganos y tejidos. Los virus no se consideran seres virus aunque realice muchas funciones propias de la célula viva, lo que ocurre aquí es que éstos carecen de vida independiente, reproducción y capacidad de crecimiento. Como mencionamos en el párrafo anterior, la definición de célula asegura que la rama que se encarga de su estudio es la biología. La misma analiza su constitución molecular y la forma que tienen de cooperar para constituir así los organismos complejos. El conocimiento de este término es fundamental para comprender cómo funciona el cuerpo humano, el por qué envejece, se enferma y se desarrolla.

lunes, 6 de junio de 2011

SISTEMA DIGESTIVO 2

 VIDEO: EL SISTEMA DIGESTIVO 2

 El Sistema Digestivo

El siatema digestivo es el conjunto de órganos (boca, faringe, esófago, estómago, intestino delgado e intestino grueso) encargados del proceso de la digestión, es decir, la transformación de los alimentos para que puedan ser absorbidos y utilizados por las células del organismo.
La función que realiza es la de transporte (alimentos), secreción (jugos digestivos), absorción (nutrientes) y excreción (mediante el proceso de defecación).
El proceso de la digestión es el mismo en todos los animales monogástricos: transformar los glúcidos, lípidos y proteínas en unidades más sencillas, gracias a las enzimas digestivas, para que puedan ser absorbidas y transportadas por la sangre.

Descripción y funciones

El aparato digestivo es un largo tubo, con importantes glándulas asociadas, se encarga de transformar los alimentos en sustancias simples y fácilmente utilizables por el organismo.
Desde la boca hasta el ano, el tubo digestivo mide unos once metros de longitud. En la boca ya empieza propiamente la digestión. Los dientes trituran los alimentos y las secreciones de las glándulas salivales los humedecen e inician su descomposición química. Luego, el bolo alimenticio cruza la faringe, sigue por el esófago y llega al estómago, una bolsa muscular de litro y medio de capacidad, en condiciones normales, cuya mucosa segrega el potente jugo gástrico, en el estómago, el alimento es agitado hasta convertirse en el quimo.
A la salida del estómago, el tubo digestivo se prolonga con el intestino delgado, de unos cinco metros de largo, aunque muy replegado sobre sí mismo. En su primera porción o duodeno recibe secreciones de las glándulas intestinales, la bilis y los jugos del páncreas. Todas estas secreciones contienen una gran cantidad de enzimas que degradan los alimentos y los transforman en sustancias solubles simples.
El tubo digestivo continúa por el intestino grueso, de algo más de metro y medio de longitud. Su porción final es el recto, que termina en el ano, por donde se evacuan al exterior los restos indigeribles de los alimentos.